“En 2018 entraron en vigor el nuevo Reglamento Europeo de Protección de Datos y la nueva Ley Orgánica 3/2018, de Protección de Datos Personales, que van a permitir que todos tengamos un mayor control sobre nuestros datos.”
*** Escrito por Juan José Peréz
Con este texto comienza la información que la CNMC envía a las personas cuyos datos recoge y trata en sus sistemas, con el fin de cumplir su misión de interés público. En él se hace referencia a un hecho fundamental en la breve historia de la protección de los datos de carácter personal: la entrada en vigor del Reglamento Europeo de Protección de Datos (entre nosotros, el RGPD, o sencillamente, el Reglamento). Fue un 25 de mayo, hace ya un año.
Fundamental, por el motivo que también recoge el texto: el muy europeo RGPD, y su joven compañera de viaje, la muy española Ley Orgánica 3/2018 (para unos la LOPDGDD, aunque para mí, que la siento más de la familia y no pronuncio bien cinco consonantes juntas, es la nueva LOPD), juntos, han permitido que tengamos un mayor control sobre nuestros datos. ¿Y cómo lo han conseguido?
Algunos hablarán de la “responsabilidad proactiva”, traducción voluntariosa y expansiva de la “accountability” anglosajona del texto original, y que supone que aquél que trata nuestros datos debe preocuparse por su bienestar. Preocuparse de verdad. No sólo con buenas palabras, sino con hechos y dejando prueba de ellos. Sí, es un logro considerable. Un avance, sin duda.
Otros hablarán de las sanciones, que según el nuevo Reglamento puede que hagan a muchos pensárselo dos y tres veces antes de incumplirlo. Porque el órgano que lo vigila, la Agencia Española de Protección de Datos, no se lo toma a broma.
Pero para mí, lo que ha conseguido el Reglamento en su primer año de vida, es que mucha, mucha gente que no hablaba de la protección de datos, ahora lo haga. Que haya surgido esta preocupación. Que en cuanto sueltas en una conversación (en el trabajo, con tu familia, incluso en el bar desayunando) que trabajas en esto, siempre hay alguien que te plantea un caso, su caso, personal por definición.
Y eso, que todos nos preocupemos por un valor esencial, un requisito para el ejercicio de nuestras libertades, como es la protección de nuestra propia identidad, es algo que indudablemente se lo debemos al RGPD. Y a la nueva LOPD. Y a todos los que, en la medida de sus posibilidades, tratan de que se cumplan.
Por todo ello, mi querido Reglamento… ¡Feliz Cumpleaños!
Juan José Pérez, es el Delegado de Protección de Datos de la CNMC (dpd@cnmc.es)
ESTE REGLAMENTO NO VALE NA… ejem, tiene «margen de mejora». O al menos no funciona en España.
Cuando diferentes empresas se turnan para hacerte CIENTOS DE LLAMADAS en pocos dias, contactan contigo y con tus familiares, INSISTEN DE MANERA OBSESIVA, ENFERMIZA en que les pagues una deuda que se niegan a reclamar legalmente –porque saben que no puedes pagarla, pero te coaccionan cual mafioso que pide dinero a sus extorsionados–, O cuando pides a todo comercial que te llama que desista, que no quieres ollas a presión ni seguros ni cambiar de telefono, ni gas natural, ni les vas a dar una factura de luz para comprobar nosequé, ni les vas a dar datos para un sorteo, etc… pero al rato aparece otro que te vuelve a llamar… ¡¡¡AARRRGHH!!! EL RGPD NO ESTÁ FUNCIONANDO EN ESPAÑA.
Se puede comprender que intenten contactar UNA VEZ –normal, son empresas de recobros y de servicios, a veces la ley les ampara según para qué– pero eso no les da derecho a hacer CIENTOS DE LLAMADAS en pocos dias, aún pidiéndoles que paren ese tipo de coacción o extorsión para que les paguemos o les compremos un producto. Les da igual, qué cansinos…
SE TURNAN, van cambiando, para así poder realizar el acoso o el SPAM de manera «legal»
Y yo le pregunto a la AEPD: ¿QUIÉN TIENE NUESTROS DATOS PERSONALES? Yo no tengo que darle a la AEPD ningún dato. Son ellos los que me lo tienen que dar a mí. Me gustaría ver una lista para poder cortar de raiz toda esta INFESTACIÓN de SPAM. ¿De qué me sirve pedirle a una empresa que desista si al dia siguiente otra nueva consigue mis datos y continúa esa táctica de SPAM-acoso?
Hay margen ABISMAL para mejorar el cumplimiento del RGPD. Ánimo.