“Hola, soy Edu, feliz Navidad”

¿Recuerdas la célebre frase del anuncio de Airtel en 1997? Por aquel entonces, felicitar las fiestas por teléfono (¡y fijo!) era más habitual que hoy en día. Primero los SMS y después, la llegada de Whatsapp, nos acostumbraron a enviar un mensaje.

Han pasado unos cuantos años…

Comentábamos que el tráfico de voz se ha ido estancando en los últimos años, sobre todo en el caso de la telefonía fija. Las llamadas vía móvil todavía viven un buen momento (mucho mejor desde que los minutos de voz móvil entran en las tarifas y ofertas empaquetadas) y, en 2020, por ejemplo, el tráfico de voz aumentó un significativo 21,2% respecto al año anterior (básicamente por efecto de la pandemia).

La consolidación de Whatsapp y otras aplicaciones de mensajería ha dejado los SMS como patrimonio de las comunicaciones empresariales. El envío de mensajes entre abonados se redujo un 11,1% en 2020, confirmando la tendencia registrada en los últimos años. Este hecho ha provocado una caída constante tanto en ingresos como en tráfico del sistema de mensajería principalmente en el segmento residencial.

¿Y qué pasa con las llamadas a números como los 902 o los 800?  Ya te hemos contado en más de una ocasión lo que debes tener en cuenta para evitar sustos en la factura. Por lo que respecta a estos servicios de tarifas especiales, en 2020 registraron un tráfico total de 564,8 millones de minutos y se facturaron 127 millones de euros vinculados a estos servicios. Se repartieron así:

Y ya que hablamos de llamadas, ¿cuándo has llamado desde una cabina telefónica por última vez? Guarda ese recuerdo (si lo tienes) porque ahora sí que tienen los días contados. De hecho, desde el 1 de enero de 2022 ya estarán fuera del servicio universal de telecomunicaciones. Por aquí hemos hablado muchísimo de cabinas.

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