De vez en cuando en el blog os contamos cosas interesantes sobre el mundo del Gas Natural Licuado (GNL). Hoy es el turno del servicio a través del cual se cargan de GNL los camiones cisterna en las plantas regasificadoras españolas (ver informe). De esta manera, se puede realizar su transporte terrestre hasta los puntos donde no llega la red de gaseoductos.
A pesar de que un camión cisterna cargado de GNL no sea la cosa más glamourosa del mundo, este tipo de transporte es esencial para cubrir una demanda cada vez mayor de combustibles para usos industriales, vehículos de todo tipo (turismos, camiones, autobuses, etc.) y buques no solo en España sino también en otros países.
Carga de los camiones y destino final
El esquema que os hemos presentado antes muestra el proceso del servicio de carga de cisternas y destinos del GNL. La contratación del servicio de carga de cisternas dará derecho al uso de las instalaciones necesarias para la carga de vehículos cisterna de GNL en una planta de regasificación. El GNL cargado en los camiones cisterna es transportado hasta las plantas satélite (PS en el gráfico), desde las cuales se abastece a los consumidores finales. De este modo, se hace posible el suministro de gas natural en aquellas zonas a las que no llega la red de transporte y distribución. Existen dos tipos plantas satélite.
- Las de distribución: suministra gas a redes de distribución aisladas, a las que se encuentran conectados los consumidores finales, principalmente doméstico-comerciales, pero también industriales.
- Las monocliente: suministra gas a un único consumidor final, principalmente del sector industrial o para uso en vehículos de transporte.
Asimismo, el GNL cargado en cisternas puede tener otro destino final diferente de las PS, que es el suministro directo a buques para su utilización como combustible. Esta operación se conoce como «bunkering».
Algunos datos relevantes del servicio
Las infraestructuras de carga de cisternas de las plantas de regasificación cuentan con un régimen de acceso regulado, de modo que los usuarios (comercializadores) que quieren hacer uso de las mismas deben acudir a los procedimientos de asignación de capacidad, en condiciones transparentes,
homogéneas y no discriminatorias. A diferencia de estas, la actividad de transporte de GNL mediante camiones cisterna es una actividad que no está regulada y se desarrolla en régimen de libre competencia.
43.000 camiones cargados en plantas regasificadoras
Según los últimos datos de la CNMC, entre enero y octubre de 2020, la demanda del servicio de carga de camiones cisterna aumentó un 5,4%, con respecto al mismo periodo del año anterior, a pesar del contexto generalizado de reducción de la demanda de gas por la pandemia de la Covid-19.
En 2019, en España se cargaron en torno a 43.000 camiones cisterna de GNL en las plantas de regasificación, que suministraron el 3,2% de la demanda de gas natural. Estos abastecieron a una multitud de destinos, que los emplearon con diferentes usos: industrial, comercial, doméstico, como combustible de vehículos terrestres y de barcos, etc.
Destino de los camiones cisterna
Según se aprecia en el mapa anterior, los mayores volúmenes de descarga se concentran en Andalucía (depresión del Guadalquivir, Sevilla, Córdoba y Almería), Cataluña (especialmente en Lérida y Barcelona), Levante (en la Comunidad Valenciana y en Murcia) y Galicia. Las provincias que registraron las mayores demandas
fueron Barcelona (1.223 GWh), Sevilla (1.028 GWh) y Murcia (841 GWh).
Destino de las cisternas (círculos naranjas) desde cada planta de regasificación. Fuente CNMC.
Bilbao y Barcelona, en máximos
El interés por la contratación de capacidad de carga de cisternas es muy elevado en algunas plantas de regasificación, especialmente en el caso de las terminales de Bilbao y Barcelona.
De hecho, en determinados periodos, la contratación de capacidad ha tocado máximos y se han registrado primas elevadas en las subastas de asignación de capacidad. El uso de la capacidad contratada es especialmente elevado, en general, en periodos invernales, de lunes a jueves, y se reduce durante los fines de semana.
Debido a las previsiones de aumento de la demanda de GNL suministrado a través de cisternas en los próximos años, su impacto no será homogéneo en las plantas de regasificación, y provocará saturación de los cargaderos de cisternas con la consiguiente dificultad a la hora de atender la demanda prevista en su zona de influencia.
Gestión de las congestiones
En consecuencia, la CNMC, en el corto plazo y dentro del ámbito de sus funciones, desarrollará mecanismos adicionales a los regulados actualmente para gestionar las congestiones, maximizar el uso de la capacidad existente y evitar el acaparamiento de esta.
Además, en el medio plazo, se podrá valorar el incremento de la capacidad de carga de cisternas del sistema gasista, conjugando de forma apropiada las necesidades del mercado con los principios de política energética y la protección de los consumidores.
Pienso que todos los camiones cisternas deben tener una evaluación previa del agua que trasladan porque en ocasiones transportan agua no potable y eso es perjudicial para todos