El evento que tuvo lugar en Las Vegas (EE.UU), entre los días 6 y 9 de enero, reunió a los grandes fabricantes de la industria automovilística, entre los que se pudo ver a Ford, Toyota, BMW, Audi, Chevrolet entre otros… haciendo palpable que las marcas cada vez están más interesadas en la tecnología y por ello también están más presentes en este tipo de eventos.
*** Escrito por Alberto Esteban
Como hemos podido comprobar en los últimos años, la transformación tecnológica es patente, la industria ha evolucionado mucho y rápido y la tecnología está cada vez más presente. Aunque aún no tenemos coches autónomos, de momento lo que la industria sí tiene es un gran desarrollo aplicado de las tecnologías, lo que ha fomentado un crecimiento de las ventas y una clara recuperación del sector.
El valor de las compañías automovilísticas se ve ahora amenazado por la posible entrada de nuevos agentes, compañías de tecnologías de la información o incluso compañías de telecomunicaciones. En este contexto las empresas de la industria tienen mucho que perder y las nuevas empresas de la era digital bastante que ganar. Sin embargo, todo apunta a una cooperación entre la industria tradicional y las telecos, puesto que cada una se introducirá en un campo diverso que realmente no es el suyo.
Con este panorama por delante, con la certeza de que los coches autónomos llegarán tarde o temprano y con el hecho de que las telecomunicaciones se unirán a la industria a través de la conectividad, se plantean varios enigmas en el sector de las telecos.
Conectividad y privacidad
Como dijo el comisario europeo Oettinger en su discurso en el Fórum Anual de Reguladores Europeos de Comunicaciones Electrónicas, “la conectividad hoy en día es crucial” incluso para los coches. Juntas, la conectividad y las mejoras en movilidad, harán que los coches “conectados” estén más automatizados y se abrirán grandes oportunidades de negocio en torno a la industria. Cisco calcula que en 2019 habrá 1.000 millones de coches conectados en las carreteras.
La pregunta que se hizo el comisario europeo es si la conectividad estará disponible en cualquier lugar y en cualquier momento, y si los datos podrán ser almacenados de forma segura a la vez que se preguntó quién podrá acceder y utilizar estos datos…
La pelota está ahora en el tejado de las grandes empresas de telecomunicaciones que tendrán que trabajar para responder a estas preguntas y hacerlo de la manera más segura posible, puesto que se está planteando un modelo de coches conectados a Internet a lo largo de las carreteras, autopistas y autovías de los diferentes países europeos, lo que permitirá de paso llevar estas redes de alta velocidad a zonas con menos densidad de población.
Más allá de la seguridad y la privacidad, el comisario europeo apuntó otros dos desafíos que traerán los coches conectados: que estén “bajo el mismo marco legal” en Europa y que las tecnologías sean “interoperables”.
¿Debería un fabricante de coches conectados tener las mismas obligaciones legales que tiene un operador de telecomunicaciones? La CNMC, a través del grupo de reguladores europeos de telecos, está analizando las implicaciones regulatorias de estas innovaciones tecnológicas.
Por su parte, Peugeot y Citroën ya están inscritas para prestar servicios de telecomunicaciones en España.
[…] Mientras tanto, Peugeot y Citroën ya están inscritas para prestar servicios de telecomunicaciones en España. […]
Muy interesante la publicación, aporta contenido de valor. Saludos