¡La Semana Santa ya está aquí! Seguro que muchos tenéis planes para viajar fuera de España durante estos días festivos y, como no, llevaréis vuestro teléfono móvil.

Compartir fotos en las redes sociales, llamar para confirmar reservas y recibir sms o correos sobre las actividades que vais a realizar son acciones habituales que pueden llegar a repercutir en lo que pagamos a final de mes. Por estos y otros motivos, hoy en el Blog de la CNMC os traemos los datos más relevantes del informe que hemos publicado sobre itinerancia internacional, también conocida como ‘roaming’. Analizamos los cambios en el sector producidos entre septiembre de 2014 y marzo de 2018. ¡Empezamos!

Foto cortesía de Free-Photos en Pixabay

*** Escrito por Mara Martín Matilla

Hay que recordar que el 15 de junio del 2017 Europa dijo adiós al roaming (con la aprobación de la metodología RLAH, Roam like At Home) tras unas largas negociaciones entre los países miembros que se inició en el año 2007 (con un calendario de reducción de los precios).

Desde junio de 2017 pagamos como en casa o, en otras palabras: los usuarios pagan por una llamada de voz, un mensaje o transmisión de datos sin importar que la comunicación se realice desde su país de residencia o desde cualquier otro Estado Miembro. Es decir, los proveedores de servicios de telecomunicaciones deben facturar a sus abonados por los servicios de roaming los mismos precios que les facturarían por demandar esos servicios en el país de origen.

Descenso en picado de los precios de llamadas y datos

Durante ese tiempo, la regulación de los precios de servicios finales o minoristas a clientes propios que están en el extranjero ha provocado un descenso del 95,4% en los precios relativos al servicio de llamadas, en comparación con los precios que había vigentes antes de la regulación comunitaria que comenzó en el año 2007. En concreto, el precio en llamadas realizadas desde países comunitarios ha pasado de 85 céntimos por minuto a 3,9 céntimos en 2018. Por su parte, las llamadas recibidas han pasado incluso a ser un servicio gratuito:

En cuanto al acceso y uso de datos, durante estos cuatro años los precios han caído un 98,1%. Así, el precio por GB ofrecido por los operadores españoles ha disminuido de los 200€ en 2014, cuando comenzó la regulación de los precios de este servicio a los 4,1€ en 2018. Dicha caída se entiende por la eliminación de los sobrecostes de itinerancia tras la entrada en vigor del roaming. En paralelo, y como ya os contamos, ha aumentado exponencialmente el consumo:

Menos SMS, pero más caros

Por el contrario, los efectos del fin del roaming no se han percibido tanto en los en los precios de la mensajería (SMS). ¿Por qué esta tendencia? Esto se debe a que el precio de enviar un SMS dentro del mercado nacional (6,31 céntimos) era mayor que la Eurotarifa aplicada previamente (6 céntimos) desde un país comunitario. Sin embargo, el uso de este servicio es cada vez más residual y minoritario, al contrario que lo ocurre con la transmisión de datos.

A los operadores no les ha ido tan mal

Dentro del mercado mayorista, que incluye los servicios móviles que presta un operador a otro operador extranjero cuando sus clientes acceden a dichos servicios desde un país extranjero en el que su operador nacional no dispone de red propia, el acceso a los datos es el servicio que genera mayor volumen de ingresos, teniendo en cuenta el volumen de facturación, con una tendencia que crece de forma progresiva desde 2014.

Si os habéis quedado con ganas de más, aquí podéis consultar el documento completo: ‘Informe relativo al servicio de itinerancia internacional en la UE’

También podéis consultar la nota de prensa

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