Una tela transparente que nos rodee y conforme un panel en el que todo está conectado. Se conoce como el Internet de las Cosas o Internet of Things (IOT) y aunque ya lleva un tiempo intentando hacerse un hueco en nuestra vida diaria no ha sido hasta ahora cuando su implantación se prevé inmediata. O eso proclama, al menos, el Mobile World Congress, tras convertirlo en protagonista absoluto de su edición anual, con permiso de las redes 5G, la realidad virtual y la inteligencia artificial.

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Foto tomada de Flickr, cortesía de Tumitu Design

*** Escrito por Sara Ledo

Con el coche conectado como punta de lanza, en la feria de telefonía móvil más importante del mundo que se ha celebrado esta semana en Barcelona hemos visto desde maletas que indican su posición o aparcamientos que avisan cuando están libres hasta sensores para tanques de butano que detectan cuando el suministro es bajo dispositivos que avisan cuando una vaca se pone de parto.
Soluciones innovadoras. Para nosotros y también para los reguladores, por eso, el BEREC (el regulador de los reguladores en materia de telecos) reunía hace algunas semanas en Bruselas a cerca de cien expertos, para “entender” qué es eso del Internet de las cosas y hacerle frente.
“Los reguladores pueden jugar un papel fundamental en devolver a Europa el liderazgo tecnológico”, comentó Sébastien Soriano, presidente de ARCEP, el regulador francés de telecos y servicios postales, durante el workshop “Enabling the Internet of things”.
Con esta premisa se desarrolló una jornada que contó con la participación de todas las autoridades reguladoras europeas, así como autoridades competentes en otras materias relevantes para el Internet de las cosas, y los stakeholders más representativos de la industria, en particular  de la industria de  la automoción, la energía, el desarrollo de aplicaciones y las telecomunicaciones. Todo ello, con la intención de fomentar un entorno favorable a la innovación y hacerlo de manera que el consumidor sea el gran beneficiado.
Durante el debate se hizo especial hincapié en uno de los principales problemas de la red de redes: la privacidad, la seguridad y los derechos de los consumidores comenzaba la primera sesión del workshop que avanzaba con la diversidad de los modelos de negocio y la interoperabilidad.
“En estos 20 años que llevamos abriendo el mercado a la competencia tenemos competidores importantes en Europa, y eso es genial, operadores alternativos que realmente han encontrado su sitio, pero al mismo tiempo vemos como IOT podría incluir diferentes jugadores de mercado, no solo operadores diferentes, sino también un modelo económico diferente, un plan de negocio diferente, quizás incluso usuarios que operasen por si mismos algunos sistemas de IOT”, planteó Soriano al inicio del encuentro.
En este contexto, para Soriano es fundamental rodearse de los mejores, los que más saben sobre el Internet de las cosas para que sean ellos quienes les muestren el camino hacia ese futuro que parece cada vez más inmediato y a la vez más desconocido.
La tercera sesión del workshop puso el foco en el análisis de los recursos públicos que se precisan para prestar estos servicios (recursos de numeración y espectro) y el hipotético riesgo de que la escasez de estos recursos afecte al crecimiento del sector, aunque a día de hoy no existe tal problema; mientras la cuarta hacía lo propio sobre la industria del Internet de las cosas en ámbitos relacionados con la energía y los transportes.
Para más información pulsa aquí. Y si quieres ver los vídeos:
Opening / Introduction to the IoT Report/ Session I: Privacy, network security & consumers’ rights
Session II: Diversity of business models & interoperability
Session III: Scarce resources (numbers and frequencies)
Session IV: Focus on IoT industry use cases (energy & transportation) / Conclusions

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