¿Disfrutarías navegando por a Internet mientras vuelas? o por el contrario ¿crees que la soledad del cielo es ideal para desconectar? Aunque ya hace muchos años que se habla de la conexión de banda ancha en los aviones y en Estados Unidos un buen número de aerolíneas disponen de este servicio, no parece que los pasajeros estén demasiado entusiasmados con la idea.

A volar con Wi-Fi. Foto de GlennFleishman

De hecho, según algunos analistas, en EEUU, menos del 10% de los pasajeros que podrían estar conectados hacen uso de esta conexión durante el vuelo.

 

La cifra aún podría ser más baja si tenemos en cuenta que, como se trata de de un nuevo servicio, en algunas aerolíneas norteamericanas se está ofreciendo de manera gratuita. Es decir que dentro de un tiempo, cuando empiecen a cobrar, el porcentaje podría verse notablemente reducido. Según este estudio uno de los problemas más grandes para los usuarios es el precio. Gogo, el proveedor de internet más grande de Estados Unidos y que tiene acuerdos con la mayoría de compañías cobra unos 5 dólares por conexión en un vuelo de 90 minutos, 10 dólares, por vuelo de 3 horas y 13 dólares, si el vuelo es más largo.

A pesar de todo, las compañías aéreas norteamericanas están apostando por instalar Wi-Fi como uno de los pocos nuevos servicios en los que las aerolíneas gastan dinero en época de crisis (cuesta unos 100.000 dólares instalar el servicio Gogo en un avión). Algunos expertos coinciden en que, con una política de precios más adecuada, la conexión en el vuelo puede ayudar a los ingresos de las compañías tanto o más que los bocadillos y las bebidas de pago.  AirTran, por ejemplo, ha empezado a apostar por un precio más bajo, de 7,95 dólares, en los vuelos de cualquier duración, para aquellos pasajeros que utilizan Wi-Fi en teléfonos inteligentes. Con un iPhone o una BlackBerry habilitados para Wi-Fi, el problema del espacio reducido disminuye considerablemente.

Por cierto, en la era de máximo apogeo de las redes sociales, los aviones no escapan de esta moda. En concreto, la compañía Virgin, además de ofrecer Wi-fi en sus vuelos, incorpora servicios de mensajería instantánea asiento-a-asiento a través de las pantallas de vídeo del respaldo.

Mensajes seat-to-seat. Foto de Virgin American

Mensajes seat-to-seat. Foto de Virgin American

A pesar de que el servicio de conexión durante el vuelo es casi una exclusiva de EE UU (Virgin America, United Airlines, Delta Airlines, American Airlines, Air Tran, Air Canada…), el primer vuelo con acceso a Internet, gracias al sistema Connexion de Boeing, fue en mayo de 2004 entre Munich y Los Angeles, operado por Lufthansa. Precisamente, la compañía germana ha anunciado que, a lo largo de este mismo año, habilitará de nuevo el servicio -después de haberlo suspendido entre 2006 y 2010- a través de FlyNet, que permitirá a los pasajeros conectarse a Internet a través de portátiles o dispositivos móviles, incluso cuando se esté volando por el océano, gracias a una tecnología satelitar proporcionada por Panasonic. En Europa, tan sólo Lufthansa y Scandinavian Airlines prevéen implementar este servicio en breve.

También en Asia operan compañías que ofrecen el servicio como Singapore Airlines o Korean Air, e incluso la aerolínea  Cathay Pacific ha anunciado que quiere actualizar sus aviones con sistemas para conectarse a Internet a una velocidad de 50Mbps. 

Según los datos de la consultora In-Stat, a final de 2010, habrá unos 2.000 aviones habilitados  con conexión Wi-Fi y los ingresos de la banda ancha en vuelo llegarán a los 95 millones de dólares.

Mientras, en España, se acaba de aprobar la Orden ITC/1878/2010 del Ministerio de Industria por la que se regula la prestación de los servicios de comunicaciones móviles en aeronaves en vuelo y que permitir  hablar y mandar menajes de texto desde el teléfono móvil durante el vuelo, aunque por el momento no permitirá  conexión a Internet. Entre otras cosas, se estipula que la altura mínima desde el suelo para cualquier transmisión del sistema MCA (Mobile Communication on Aircraft: son los servicios de comunicaciones electrónicas prestados por un operador, para que los pasajeros de líneas aéreas puedan utilizar las redes de comunicaciones públicas durante el vuelo, sin establecer conexiones directas con las redes móviles terrestres) en funcionamiento será de 3.000 metros y que, en caso de aeronaves matriculadas en España, el operador interesado deberá estar inscrito en el Registro de Operadores de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones como operador del servicio MCA y disponer de una concesión administrativa. Pese a esta reglamentación, aún pasará cierto tiempo hasta que se pueda usar el teléfono en todos los aviones. El servicio, además, no será barato: la previsión de tarifas que manejan los operadores cuando una aerolínea esté equipada para ofrecer el servicio van desde los 2,36 euros, con IVA, para el establecimiento de llamada, a los 4,72 euros (con IVA) por minuto de llamada. El envío de mensajes costará 1,77 euros (con IVA). Las tarifas se establecen atendiendo a que la conexión se establece vía satélite.

Si tienes curiosidad en saber cómo funciona la conexión en pleno vuelo, éste es un ilustrativo y breve video de la compañía Aircell sobre el servicio Gogo Inflight, implementado en la aerolínea AirTran Airways:

[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=3PovJb9C_-s&feature=player_embedded[/youtube]

Si te interesa el tema, puedes consultar también:

Banda ancha en pleno vuelo

Móvil en el avión

 

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