Lejos podrían quedar los días en las redes fijas de telecos recibían el apelativo (despectivo) de dumb pipes, las tuberías tontas. Los operadores móviles siempre intentaron huir de esa visión estereotipada, y desde un principio pelearon por no ser vistos como sus primos hermanos y acarrear la caraterística de una commodity: márgenes bajos, ingresos y precios decrecientes.
Pero los caminos de la telefonía (fija y móvil) y sus objetivos son inexorablemente los mismos: proporcionar capacidad de red para transmisión de datos e intentar que otros actores del sector, en cualquier otra parte de la cadena de valor, no se lleven el grueso de los beneficios. El escenario puede estar cambiando, y es que en este nuevo mundo protagonizado por el auge de la banda ancha móvil, la calidad y la estabilidad de la conectividad son claves. Y puede que las tuberías sean más inteligentes de lo que pensamos.
Éste es el planteamiento de Ericsson, que acaba de publicar un estudio que ensalza el valor de las conexiones y deja bien claro que sólo con smart pipes, con tuberías inteligentes, los operadores podrán ofrecer a sus clientes las capacidades y valores añadidos que reclaman. Los analistas de la empresa (que, no nos olvidemos, tiene como negocio las infraestructuras de redes móviles) creen que el futuro basado en la banda ancha móvil representa un desafío y una oportunidad para los operadores: aquellos que pueden ofrecer la mejor experiencia para el usuario en cuanto a la disponibilidad, velocidad y calidad de la conexión ganarán la partida.
¿Por qué motivos es tan importante la conectividad?
– El primero es el espectacular crecimiento de las suscripciones de banda ancha móvil: Ericsson predice que habrá 50 millones de dispositivos conectados en 2020.
– El segundo es la tendencia al alza de servicios y aplicaciones: el crecimiento masivo de la App Store de Apple es el principal ejemplo de un ecosistema completamente nuevo, en el que miles de nuevas aplicaciones se están poniendo en marcha a un ritmo espectacular.
A ello sumamos otros cambios en el panorama: el paso de dispositivos compartidos (PC) a personales (móviles); la ubicación de contenidos y aplicaciones en la nube y no en un perfil local; el consumo de energía que no era importante en los equipos enchufables es ahora imprescindible en los terminales móviles; el modelo de negocio evoluciona para cubrir necesidades de usuarios cada vez más específicas y diferenciadas…
Total, que las operadoras han de tomar buena nota y buscar soluciones. Para algunos analistas, 2011 es el año en que deben empezar a reinventarse. En este escenario futuro, en el que las inversiones se hace absolutamente necesarias (en redes de fibra y en espectro) tanto los suministradores de infraestructuras como los proveedores de contenidos estarán condenados a entenderse, a pesar de que, para algunos, la guerra aún está por llegar. Habrá que cambiar el modelo de negocio cuando el consumo crece de forma exponencial, mientras que los ingresos no siguen por el mismo camino. Según Chetan Sharma, en Estados Unidos, los ingresos de voz se han reducido un 7 por ciento en los últimos cuatro años, mientras que los ingresos de datos se han disparado un 132 por ciento. En general, los ingresos de datos representan ya el 35 por ciento de los ingresos totales de la industria inalámbrica. La reciente compra de Skype por Microsoft podría acelerar este cambio de mentalidad en los operadores.
¿Qué nos espera?
Con todo ello, Ericsson preveé tres olas de crecimiento para los operadores:
1- La fase del all you can eat, de la talla única: la que hemos vivido hasta ahora, con la popularidad de las tarifas planas.
2- La fase de la diferenciación, en la que estamos entrando, con diferentes perfiles de ofertas: clientes con poca demanda, calidad más baja y precio menor; clientes con grandes demandas, calidad alta y precio mayor. Aquí, los servicios diferenciados empiezan a ser la clave para tener éxito en un mercado cada día más exigente. Y esto entra de lleno en el debate de la neutralidad de la red y la necesidad de transparencia frente a los usuarios.
3- La fase del connecting everything, el gran desafío: el éxito dependerá no sólo de las ampliaciones que hagan posible conectar miles de millones de usuarios, sino también de la gestión a esta escala tan bestial. Se hace imprescindible la necesidad de nuevos modelos de negocio. En esta nueva ola, la buena cobertura, la velocidad y la calidad de conexión del usuario se convertirán en elementos diferenciadores tan importantes para los usuarios como los dispositivos o las aplicaciones.
Por cierto que hace bien poco en el blog os hablábamos de las estrategias de los operadores para evitar el colapso de las redes: según un estudio de Telesperience al que nos referíamos, la “fórmula favorita” de los operadores para evitar el colapso pasa por el traffic shaping. Los expertos consultados afirman que esta técnica será empleada por el 97% de los operadores en 2013. Esta fórmula pasa por modificar el tráfico cuando hay picos de demanda y aquellas que se encargan de priorizar el tráfico. En dos años también crecerá la técnica denominada como offloading (el 73% de los operadores la emplearán en 2013). Esta técnica permite la utilización de otras redes o recursos alternativos como WiMax, femtoceldas o puntos WiFi. Y uno de los datos más llamativos del informe es que un 53% de lo expertos consultados aseguraba que recurría a estas técnicas con el fin de retrasar la incorporación de las nuevas infraestructuras (antenas y redes), mientras que un 60% reconocen que sus redes no están capacitadas para soportar el actual volumen de tráfico.
[…] Y las tuberías se volvieron inteligentes blogcmt.com/2011/05/26/y-las-tuberias-se-volvieron-inteli… por neotrix.es hace 6 segundos […]
A parte de que al entrar en la fase 2. Internet dejará de ser lo que había sido hasta ahora. Los abusos de los ISP serán mayores. En lo referente a los precios.
Además que el fin de las tarifas planas, será perjudicial, para los operadores, aunque se crean que no.
Por otro lado sigo sin entender por que Google, entre otros tienen que pagar por su uso a los operadores. Ya que es jugar a dos barajas. Reciben ingresos de los clientes (usuarios) de los gestores de contenidos y servicios de la sociedad de la información y además reciben dinero directo de los susodichos últimos.
No tiene lógica ninguna.
Además los ISP se olvidan de algo. Hablan de que no se podrían poner contenidos en internet, sin unas infraestructuras. Comparándolo con cañerías de agua. Y la comparación estaría bien sino olvidasen un pequeño detalle, el agua sin cañerías no se podría transportar. Pero de la misma forma una cañería sin agua no valdría para nada. Me imagino que se me entiende.
Salu2
El tema de las tarifas planas es muy complejo. Por un lado los usuarios están más o menos acostumbradas a ellas y de hecho las demandas, ¿la razón? pues que la gente prefiere estar tranquila, planificar sus gastos y saber que pagará X euros al mes. Y alguien dirá, ¿y qué, el precio seguirá siendo fijo? y en realidad no es así porque las necesidades de un usuario no son ni mucho menos fijas ¿qué vas a hacer cambiar de tarifa si un día quieres ver HD por streaming? ¿cque te cobren según el tipo de tráfico que demandes y no tengas ni idea de si un mes te va a llegar una factura de 20 o 100 euros? Eso no va a funcionar, la gente normal quiere poder acceder a todo tipo de contenido y pagar algo previsible y controlable todos los meses, lo demás son cuentos. Los operadores por su lado pretenden imponer un modelo del estilo: si consumen poco y mal te cobro igual y si no te cobro más, negocio redondo ¿no?
El tema de la tuberias me recuerda que, tiempo atrás se le dio mucha importancia a eso, las tuberias y salieron empresa que por los desagües metian fibra optica.
No sé muy bien cómo quedó el asunto, pues solo conozco un caso real de dos edificios cercanos en Madrid unidos por la alcantarilla que hay en medio de la calle.
[…] compañías de móvil de exprimir todo el jugo a las tarifas de datos y no quedar relegadas a meros dumb pipes, aparecen nuevas formas de vender internet en el móvil. Los usuarios han de escoger la tarifa de […]
[…] de ello. De esta manera se descongestionaría parte del tráfico de las redes celulares que sería desviado a través de esos puntos Wi-Fi a redes fijas, una técnica conocida como offloading. Veamos algunas […]